LOS SI Y LOS NO DE LO SEXY

Todas queremos vernos sexy, y a quién no le gusta sentir que las miradas masculinas giran a su paso. Pero cuando hablamos de ropa sexy, el límite entre lo sensual y lo vulgar a veces es muy delgado, y seducir no tiene nada que ver con los centímetros de piel que queden al descubierto. ¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de vestirnos para seducir?



Ciertas famosas lo tienen bien claro, y cada aparición en la alfombra roja les vale una avalancha de suspiros del público y elogios de la crítica. Otras, no tanto. ¿Vemos por qué?

Los sí

- Qué mostrar. Ciertas partes de cuerpo, como los hombros, a veces pueden resultar mucho más sensuales que un escote profundo. Así lo hizo Thalía. Asimismo, mostrar sólo una pequeña porción de piel ser más inquietante de lo que imaginas; o sólo una pierna con una abertura importante, como Angelina Jolie. ¿La clave? Ser inteligente, original y alejarse de los clichés.

- Una cuestión de actitud. Puedes tener las mejores piernas o el pompis más escultural; pero si te sientes insegura de ti misma, eso es lo que proyectarás a los demás. Más que una cuestión de atuendo, la sensualidad tiene que ver con tu actitud. Queen Latifah y America Ferrera no tienen la figura o la estatura de una supermodelo, pero cuando se trata de seducir, saben muy bien cómo hacerlo.

- Dejar cosas libradas a la imaginación. "Insinúo pero no muestro", parece ser la clave. Algunas veces, sugerir con un escote que termina en el lugar exacto y dejar tu cuello al descubierto como Eva Mendes, o un vestido suelto como el de JLo, que revela tus formas mientras caminas, resultan más sexys que mostrar todo al mismo tiempo. Si las usas con inteligencia, las transparencias pueden ser tus mejores aliadas, ya sea sobre un escote o para insinuar tus piernas sin mostrarlas a través de una falda traslúcida.

- Finalmente, ten en cuenta tu cuerpo. Esta es una regla básica que no sólo aplica cuando quieres vestirte sexy. Conocer muy bien tus puntos fuertes es crucial para resaltarlos. Si no tienes la más estilizada de las figuras pero tienes unas piernas tornadas, igual puedes usar un mini-vestido; pero que no sea ceñido.

Los no

Hay ciertas prendas, accesorios o tipos de maquillaje que, utilizados en la forma incorrecta, producen el efecto contrario: nos hacen ver vulgares.

- Apretado no siempre es sexy. Sobre todo, si tienes unas libras de más. En este caso, lo único que logras es resaltar las áreas de tu cuerpo que menos te favorecen. A Mariah Carey, por ejemplo, la hubiese ayudado mucho más un vestido suelto o una camisola transparente sobre ese mismo vestido.

- No mostrar todo a la vez. Escote, minifalda y vestido ceñido... Como suele decirse es inglés, es too much, y es entonces cuando el intento por verse sensual y elegante se convierte en una celebración a la vulgaridad.

- Exceso de maquillaje. ¡Cuidado con pasarse de la raya! El límite entre un maquillaje dramático y un pintarrajo es muy delgado. Si resaltas los ojos, usa un labial liviano y viceversa, y nunca abuses del rubor. En la foto siguiente, a Christina Aguilera no sólo se le fue la mano con el maquillaje, sino que el enterizo de short con estampado animal no ayuda.