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Celebridades de Hollywood con una copa de más
Las estrellas de Hollywood suelen acompañar sus excentricidades con cantidades ilimitadas de alcohol. Muchas veces los escándalos más grandes empiezan con la primera copa.
Esto lo sabe muy bien la diva Nicole Kidman, quien en una reciente entrevista confesó el infieron personal que le tocó vivir gracias al alcoholismo de su marido, el cantante Keith Urban, quien estuvo internado en una clínica para superar su adicción.
"El alcoholismo de mi marido fue una etapa terrorífica", reveló la protagonista de “Los Otros”. El intérprete estuvo ingresado en la clínica Betty Ford y parece que ya está totalmente recuperado, aunque Kidman asegura que libra una batalla cada día para que su pareja no recaiga.
El caso de Urban no es el único, ya que fueron muchos los casos de estrellas de Hollywood que cayeron en las garras del alcoholismo más incontrolable sobre todo en la temporada 2007, donde diversos artistas fueron condenados a ingresar a tratamiento para superar su enfermedad.
Tales son los casos de Lindsay Lohan (toda una celebridad en el mundo de los escándalos y borracheras antológicas), Haley Joel Osment (que fue condenado a 60 horas de rehabilitación y reuniones de Alcohólicos Anónimos), pasando por los “veteranos” en estas lides, Drew Barrymore y Robert Downey Jr.
El show de Danny DeVitto
Hace un par de años, el pequeño DeVitto acudió a un programa de televisión a promocionar una película de corte navideño... Todo muy normal si no fuese porque llegó al programa con una impresionante cogorza y lo pudimos ver en impresionante estado de embriaguez. En fin, es lo que tienen las fechas navideñas, que quien más quien menos toma alguna copita... en este caso su acompañante era George Clooney. Lo mejor de todo sus declaraciones sobre el asunto: "sabía que las siete últimas copas eran las que me iba a emborrachar" (simplemente genial).
Bill Murray a mil por hora en un carrito de golf
Por increíble que parezca, el actor de “Cazafantasmas” fue arrestado por conducir borracho un carrito de golf por las calles de Estocolmo y de madrugada. Las autoridades de aquel país no sabían si el hecho estaba tipificado como delito. Además, él se negó a realizar el control de alcoholemía cuando así se lo requirieron.
David Hassellhoff en el lente de su hija
Bochornoso y patético lo que todos pudimos ver en un vídeo colgado en Internet del actor protagonista de la serie “Baywatch”. Y todo gracias a su hija, que decidió grabarle en estado máximo de borrachera mientras comía una hamburguesa. Ella pretendía que esto le sirviera de escarmiento y fuese a rehabilitación. Meses después el actor tenía una pequeña recaída.
La modorra de Nick Nolte
Fue fotografiado tumbado en el piso del aeropuerto de Hawai. Los testigos de la escena relataron que el actor perdió el conocimiento varios minutos y después, se mostró amable con quienes trataron de ayudarlo. En 2002 Nolte fue sentenciado a libertad condicional y rehabilitación luego de ser detenido por conducir de forma errática.
Mel Gibson y su verso antisemita
Gibson fue arrestado mientras conducía en Malibú con unos niveles de alcohol en la sangre del 0,12 por ciento, por encima del límite legal del 0,08 por ciento. Su arresto vino supuestamente acompañado de un comportamiento violento e insultante, pues Gibson trató a una policía de modo soez, se declaró dueño de Malibú y dijo que los judíos tenían la culpa "de todas las guerras del mundo".
Gust Van Sant y una foto para el recuerdo
Al director lo detuvieron de la forma más clásica: bebía alcohol mientras conducía. A pesar de su seriedad y perfil bajo, el creador de la excelente “Elephant” forma parte de la galería de fotos que tienen los agentes de la autoridad. Su imagen de la ficha policial salió publicada en todas partes. No parecía muy feliz.
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