Aunque el éxito no siempre se mide por la inteligencia, muchas celebridades cuentan con un alto coeficiente
intelectual (C. I.).
Sorprende en el caso de celebridades aparentemente huecas como Paris Hilton, y en masas de músculos como Dolph Lundgren y Arnold Schwarzenegger, pero no tanto en artistas como Madonna, Sharon Stone o Shakira.
Según los parámetros establecidos por los psicólogos, una persona normal tiene un C. I. de 90 a 109. Entre 110 y 119 se considera una inteligencia brillante (John F. Kennedy) y a partir de los 120 puntos, una inteligencia superior (Gerald Ford y Eisenhower).
Si alcanza los 130 puntos se habla de superdotado moderado (Nicole Kidman, Bill Clinton).
Por encima de 140 se sitúan los superdotados (Geena Davis), y rebasando los 160, los genios (Tarantino, James Wood).
Actrices como Natalie Portman y Kate Beckinsale y modelos como Cindy Crawford también fueron brillantes en sus estudios. Como rareza, el caso del artista Andy Warhol, con un escaso C. I. de 86. (Agencias)
Ranking de los inteligentes
Celebridades con una "inteligencia superior": (120-139): Nicole Kidman, Jodie Foster, Arnold Schwarzenegger y Paris Hilton.
Celebridades superdotadas (entre 140 y 159): Steve Martin, Hillary Clinton, Shakira y Madonna.
Genios (más de 160): Dolph Lundgren, Quentin Tarantino, Albert Einstein, Stephen Hawking, Bill Gates. Por su parte, James Woods y B. Netanyahu alcanzan el 180; el ajedrecista Bobby Fischer el 187, Gari Kaspárov el 190 y Marilyn vos Savant, la persona con el coeficiente intelectual más alto del mundo según el libro Guinness, un escalofriante 228
Un nuevo frenesí ha tomado por completo la industria cinematográfica y literaria en Estados Unidos, y está por tomarse el resto del mundo. Se trata de Twilight (o Crepúsculo), un libro de la autora Stephenie Meyer, que cuenta la historia de un amor adolescente entre una joven y un vampiro, cuya adaptación a la pantalla grande recaudó unos sorpresivos $70.6 millones en su primer fin de semana en las carteleras estadounidenses.
El éxito de la cinta se debe en primer lugar a las jovencitas preadolescentes y adolescentes fanáticas de los cuatro libros que componen esta saga, que ha vendido más de 17 millones de copias en todo el mundo y se ha traducido a 37 idiomas desde que salió el primer volumen en 2005.
Sin embargo, el triunfo real del filme fue lograr atraer a otros segmentos de la audiencia, principalmente a mujeres de más de 25 años, que conformaron el 45% de los asistentes a las salas de exhibición.
Nadie -absolutamente nadie- en Hollywood se imaginó la gran aceptación que recibiría la cinta. Tanto así que los derechos del libro estuvieron rondando varios estudios, y hasta fueron desechados por MTV Films.
Ahora, todos aquellos que dejaron pasar el guión deben estar lamentándose, pues Summit Entertainment (una pequeña productora que recientemente comenzó a hacer películas) ha encontrado su mina de oro con Twilight, pues el filme solo le costó $37 millones y ya planea adaptar el segundo libro de la serie, New Moon (Luna Nueva).
Twilight, además, ha convertido en superestrellas de la noche a la mañana a sus dos protagonistas: Robert Pattinson (Cedric Diggory en Harry Potter y el Cáliz de Fuego) y Kristen Stewart (la hija de Jodie Foster en Panic Room), y le ha otorgado a su directora, Catherine Hardwicke (que antes dirigió Thirteen), el estreno más exitoso de toda la historia para una muje
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