Aunque reyes y príncipes son multimillonarios, la crisis mundial los está obligando a llevar una vida más ‘modesta’

La crisis económica también afecta a las casas reales de Europa y, aunque sea solo un gesto público para calmar al pueblo —que está pasando muchos problemas para poder vivir día a día—, las órdenes han sido dadas y los presupuestos de los royals han sido cortados.

En Inglaterra, por ejemplo, la reina Isabel II heredó hace un par de años la fortuna de su madre (más de 70 millones de dólares en efectivo, propiedades y joyas) y, aunque no tiene que pagar impuestos de herencia por ella, sí ha tenido que pagar impuestos personales mucho más altos sobre su enorme fortuna de 750 millones de dólares.

También se habla de ‘un profundo corte de personal y gastos en sus palacios’, y la noticia de que muchos de sus ‘primos reales’ como los muy poco queridos por el pueblo —príncipes Michael y Marie-Christine de Kent (la detestada Princesa Empujadora o Princess Pushy)— en lo adelante tendrán que pagar 20 mil dólares mensuales por la ‘renta’ de su enorme apartamento en el palacio de Kensington, donde han vivido desde 1979 completamente gratis, gracias a los impuestos que pagan los ingleses.

El pueblo inglés y sus impuestos ‘financian’ a los royals, pagándole a Isabel II un salario anual de casi 12 millones de dólares, de los que ahora también tiene que pagar impuestos. Aunque todavía el gobierno les reembolsa a todos grandes cantidades por ‘gastos de representación’.

Alberto de Mónaco —hoy en día uno de los soberanos más ricos del mundo según la revista Forbes, con una fortuna personal de 1.200 millones de dólares— para suerte de sus ciudadanos no es muy gastador, sino más bien moderado en sus gastos, así que no ha llamado la atención por usar dinero excesivo del tesoro público.


Y el dinero que se les da a las princesas Carolina y Estefanía es realmente ‘modesto’ cuando se compara a lo que reciben sus colegas europeos. Esto se debe a que a la muerte de Rainiero, la fortuna personal del Príncipe fue distribuida entre sus tres hijos y cada uno es responsable de administrarla a su manera.

Carolina recibe infinidad de ropa de regalo de Chanel y su amigo Karl Lagerfeld, y su marido, el príncipe Ernesto de Hannover, es supermillonario y paga todos los gastos familiares, mientras que a la princesa Estefanía nunca le ha interesado vivir con joyas y ropa de diseñadores, y lo hace de forma muy sobria.

Según me cuentan, ya Charlene Wittstock ha sido informada con mucha seriedad de que no puede gastar mucho ‘y debe aprovechar todos los regalos que le hagan los diseñadores y amigos ricos de los Príncipes, quienes los invitan con todos los gastos pagados a infinidad de viajes y fiestas con tal de contar con su presencia’. Tal como hacían los duques de Windsor en una época de sus vidas, cuando incluso se les pagó muchísimo dinero por jugar golf en La Habana en los años 50.

En Holanda,

la Casa Real dejó saber que los gastos de la Familia Real (114 millones de dólares en el 2008) son mucho más que los 110 millones de dólares presupuestados, por lo que la reina Beatriz va a tener que meter la mano en el bolsillo y sacar unos 4 millones de su cuantiosa fortuna. Y cuando la Reina quiera usar sus yates o aviones para viajes privados, tendrá que pagar por ello. El Parlamento holandés fue sede de una polémica debido al costo del barco real De Groene Draeck, y por los viajes en avión privado de algunos miembros de la Casa Real, que resultaron escandalosos. Y ahora se espera que este año todo se regule y no haya más rollos. La reina Beatriz recibirá, en el 2009, 6 millones de dólares, alrededor de 1 millón de dólares como sueldo y 5,2 millones de dólares para ‘costos de vida, personal de sus palacios, etc.’. El príncipe Guillermo Alejandro recibirá como heredero a la corona holandesa 1,6 millones de dólares, y su esposa, la princesa Máxima, 765 mil dólares: 302 mil se consideran como salario y el resto para ‘gastos de representación’. Los demás miembros de la Casa Real no reciben asignación de los presupuestos generales del Estado y es la Reina la que los ayuda con sus gastos, aunque el Ministerio del Interior paga 14 millones adicionales por sus guardaespaldas, auto y muchos de sus empleados.

En Bélgica, donde los escándalos financieros de los royals han puesto en peligro la monarquía, ya se le ha dicho con firmeza al rey Alberto y a toda la familia que no sigan usando los aviones de la Fuerza Aérea para sus viajes privados. Y a todos los miembros de la Familia Real se les han reducido sus presupuestos de gastos, ya que el año pasado usaron los aviones del ejército ‘para 15 viajes de ida y vuelta de vacaciones’. Los recientes escándalos financieros del príncipe Laurent, uno de los hijos de los reyes Alberto y Paola de Bélgica, causaron gran malestar entre el pueblo y los reyes. ¡Y ahora los belgas vigilan sus gastos, y tratan de tenerlos a todos a raya

En España, la Familia Real parece no haber sido afectada por el corte de gastos, porque en los últimos años el rey Juan Carlos ha hecho muy buenos negocios privados y la antes exigua fortuna privada se ha multiplicado agradablemente.

Aun así la familia nunca ha sido ‘excesiva’ en sus gastos y tratan de llevar una vida discretamente cómoda, pero no muy lujosa ni con gran derroche. La reina Sofía es conocida por amar la sencillez y vigilar sus gastos, aunque se dice que la que más gasta ahora es la princesa Letizia, la que estrena conjuntos y accesorios muy elegantes, prácticamente todos los días, aunque otros comentan que su ropa ‘es comprada de diseñadores españoles a precios de descuento, porque les conviene que la Princesa lleve sus modelos’, y que algunos son incluso ‘regalos de diseñadores nuevos y de marcas famosas’.

Y ahora que la infanta Elena no tiene a su ex marido, Jaime de Marichalar, vistiéndola con grandes y carísimos modelos de los diseñadores de París, no hay duda de que la chica se está ahorrando un platal.