Resulta que no sólo las cantantes y actrices se meten a diseñadoras o las modelos a actuar o las famosas a hacer de modelos o las modelos a cantar o todas esas posibilidades de polifascetismo que se ven últimamente, sino que ahora hasta las princesas se meten a reporteras de moda.
La pequeña y guapa hija de Carolina de Mónaco tal vez se ha aburrido de su palaciega y entretenida vida y ha decidido probar suerte de una manera más original en los tiempos que corren. No quiso probar con el modelaje, la actuación ni la música como alguna vez hiciera su tía Stephania y prefirió reportear sobre lo que más le gusta después de los caballos y su novio: la moda.
Puede que lo traiga en la sangre, ya que su madre y su abuela se han caracterizado por su buen gusto al vestir en toda ocasión y Carlota ya ha demostrado que sabe lo que hace. Y como tal le brindará su sabor Casiraghi-Grimaldi a los artículos que escribirá para el Independent de Londres.
Lo más singular de todo no es que lo haya intentado, sino que a diferencia de otros infructuosos intentos con el mundo de la moda el de Carlota es una brisa de aire fresco. Pueden checar su primer trabajo sobre la exposición de David Lynch y Christian Louboutin, “Soles Mates”. Obvio no esperen una profunda reflexión sobre la muestra en que Lynch con su profunda visión de la sexualidad y el cine ha logrado conjuntar ambos aspectos en la roja suela Louboutin, pero lo ha intentado.
Esperemos a ver que tal le salen los siguientes reportajes y a ver si ahora el coeditor no le mete tanta mano al artículo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario