PABLO RUIZ

Luego de haberse ido de México hace casi 3 años por haber protagonizado un sonado escándalo en el que se le aseguraba que se le había visto vestido de mujer, el cantante argentino Pablo Ruíz está de regreso con una nueva producción discográfica, con la que además confirma lo que ya muchos sospechaban, que al intérprete de “Oh mamá” no sólo le gustan las mujeres, sino también los hombres.

En una entrevista publicada esta semana por la revista TV Notas, Ruíz declaró que luego del escándalo se fue rumbo a Argentina, debido al poco interés de las personas que lo manejaban, además del estancamiento en su carrera. Fue durante su estancia en aquel país donde tuvo oportunidad de arreglar asuntos personales, por lo que ahora vuelve renovado y con una nueva imagen, alejada de aquella ambigüedad que mostraba en los 90.

Respecto al tema de su sexualidad, declaró que le gustan ambos sexos, que le incomodan las etiquetas, por lo que piensa que es una persona que le gusta el amor, sin importar el sexo con el que nació, además de confesar que a nivel sexual ha cumplido todas sus fantasías, por lo que en ese sentido no cree en el amor de pareja, sino en un amor universal.

Sobre la posibilidad de convertirse en papá, el cantante comentó que le gustaría hacerlo con una amiga a falta de mujeres en su vida: “Deseo tener hijos, aunque no sé cómo le voy a hacer; tengo una amiga que ya me dijo que si no encontramos pareja podemos hacerlo entre nosotros”.

Cabe destacar que el cantante regresa al país con una imagen renovada, en la que puede presumir un cuerpo ejercitado, con mayor musculatura, y el que admite desea mejorar para ser admirado tanto por hombres como por mujeres.

Pablo Ruiz vuelve dispuesto a encontrar el amor en México, pero su pareja debe ser una persona sociable y muy tolerante, sin importar el sexo, ya que debido a su profesión, la mayoría de las personas con las que ha salido, son celosas.

“Soy bastante atento, bueno.. a veces mi mamá me dice que por ser tan bueno me toman por tonto, pero no, se que soy bueno y permisivo, pero se hasta donde. En ocasiones doy demasiado y se agarran el codo, pero cuando me defraudan me voy y no doy marcha atras”.