Les mando un fuerte abrazo con el cariño de siempre, después de tomar unos días de descanso, les juro que la vida se ve diferente, con más entusiasmo, con más alegría tras un respiro a la labor cotidiana.
Al entrar ya en materia, hoy quiero preguntarles ¿Qué importancia tiene que figuras conocidas a nivel internacional vengan a México?, ¿Sirve de algo, de nada?, ¿Debería importarnos?
Elton John visitó México, actuó en Chichén Itzá. Su presencia en nuestro país ha ganado la primera plana de espectáculos de diarios nacionales e internacionales. El recital fue todo un éxito, aunque no estuvo alejado de la controversia.
La estrella inglesa del pop Elton John hizo cantar a más de siete mil personas en el bello escenario de Chichén Itzá, antigua ciudad maya, en un concierto nocturno llamado “Noche de sol”.
Elton John abrió el concierto con la canción “Candle in the wind” que fue coreada por los asistentes quienes disfrutaron además de la música, de la magnificencia del lugar resaltada por la iluminación de los monumentos prehispánicos. La espectacular pirámide de Kukulcán fue el fondo de esta velada.
Sin embargo, para ciertos grupos de investigadores este concierto puso en riesgo una joya histórica como es Chichén Itzá para convertirla, aseguran en “Disneylandia”.
Por supuesto que estoy a favor de cuidar y preservar nuestras joyas históricas, nuestro pasado, nuestra cultura y se deben buscar los mecanismos para que no se arriesguen con este tipo de recitales. Las autoridades y responsables deben de escuchar y resolver todas las recomendaciones.
Pero también es un hecho que la presencia de estas figuras ayuda en gran medida a quitar la mala imagen que México tiene en el extranjero. A mostrar otro enfoque, más positivo. Los informativos por obvias razones han dado prioridad a noticias que involucran la violencia, la muerte, lucha contra el narcotráfico.
Hace unos días escuché a un mexicano que vive en el extranjero decir: “A mi tierra no voy porque ahí matan”. Es un hecho que no podemos esconder la crisis que en los últimos meses hemos atravesado, pero también es una gran mentira que México tenga en todas sus aristas un” panorama negro”.
La presencia de estas figuras ayuda en gran medida a mostrar otro enfoque de nuestro país, a demostrar que somos un pueblo con cultura, con lugares maravillosos, con historia. Que las celebridades disfrutan su estancia en México y no temen visitarnos.
México ofrece una gran variedad de atractivos y el espectáculo puede ser un verdadero instrumento de promoción para que esto así sea.
Te confieso que yo me siento muy orgulloso del lugar en el que nací, de mi gente. Gracias al periodismo conozco muchos lugares en el extranjero. He estado en grandes ciudades a las que amo como Nueva York, Los Ángeles, Miami, San Francisco, Seattle Washington, París, Venecia, Florencia, sin embargo como nuestro país no hay dos.
Es sorprendente ver que ahora sobre todo reporteros estadounidenses les pregunten a artistas con proyección internacional si no les da miedo venir a México porque es un lugar de riesgo.
El caso especifico fue el de Thalía a quien cuestionaron en una videoconferencia hasta Miami: “¿No temes venir al Distrito Federal porque en esta ciudad matan? Thalia, mujer inteligente respondió “Por supuesto que voy a visitar México y no tengo miedo, mi país no es todo lo que los noticieros muestran de violencia y crimen, mi tierra es hermosa al igual que su gente. Y hay mucho más que mostrar.”
Yo espero que Thalía cumpla su palabra y que muchos otros artistas sigan con su agenda de conciertos en tierra azteca y nosotros informarlo.
Plácido Domingo y Sarah Brightman, Miguel Bosé, Eva Longoria y Fito Páez han visitado México, disfrutando de su gente, de su gastronomía y de su mariachi.
Luciano Pavarotti en vida siempre mostró su cariño por la tierra del mariachi, de ahí la importancia de que las grandes celebridades internacionales visiten nuestra tierra.
Dentro de unos días también se reinaugurara el Palacio de Bellas Artes, Juan Gabriel presentará su más reciente producción musical en este recinto. Espero que sea todo un éxito que tenga un impacto mediático adecuado.
Antes de despedirme, quiero dejar otra reflexión, que mi quehacer periodístico me ha permitido observar. En gran medida nuestro pueblo no puede ir a estos grandes y mágicos conciertos, por una simple razón: “el poder adquisitivo” no se los permite…
En el caso de Elton John los boletos oscilaron entre los mil y diez mil pesos, ¿tú crees que un padre de familia con tres hijos tiene la capacidad económica de solventar un gasto así? Por supuesto que no.
Hace unos años visite Tajín , un lugar mágico, prehispánico y ahí recibí la primavera con un espectáculo lleno de color, música y luces inteligentes, que hacían un efecto óptico que pareciera que las pirámides se elevaban por los cielos.
Yo disfruté el espectáculo, pero que tristeza me dio cuando realicé las entrevistas, había todo menos mexicanos. El público estaba compuesto por japoneses, alemanes, canadienses, españoles e italianos que pudieron pagar por ver esta maravilla.
¿Sabes en donde estaban los mexicanos en un evento de tal magnitud? Afuera de la zona prehispánica de Tajín vendiendo camisetas, tazas y recuerdos de este recital. Mis paisanos no tuvieron para pagar y ver algo que yo cuando cierro mis ojos guardo en mis recuerdos.
Cuando hice la crónica de este recital en Tajín y que está en los archivos de Televisa Espectáculos, le pregunté a una veracruzana: “¿Le hubiera gustado entrar?”. Me respondió: “Claro joven, pero ahorita estoy más preocupada por vender mi mercancía, mis artesanías para llevarle la comida a mis hijos”.
Por eso, también es importante crear espacios donde este tipo de espectáculos sean gratuitos, que sean para el pueblo y por el pueblo.
Recordemos que entre más grande es un artista, más conciencia social tiene y ayudará a beneficiar a los más necesitados.
Ejemplos tenemos muchos, quizá uno de los que mas recuerdo es Placido Domingo quien se ha sumado a distintas verbenas populares. Pero también lo han hecho Vicente Fernández, Marco Antonio Muñiz, Tania Libertad, Guadalupe Pineda entre muchos otros.
México es muy bello, tiene una historia hermosa, publicitemos nuestra tierra, busquemos los mecanismos para que las joyas arquitectónicas no se pongan en riesgo y utilicemos al espectáculo y las grandes estrellas internacionales para mostrar otro enfoque, otro lado de nuestra tierra, uno más positivo.
Las joyas que lucio eran de Chopard y los zapatos eran de Jimmy Choo , en tono Nude ( Yo los hubiera elegido negros para que resaltaran con el vestido) 
Ana Bárbara la cantante latina y ganadora del premio grammy
